Las Tasas de Interés
Por José A. Fonseca
lunes 21, mayo 2018
En los últimos días, las tasas de rendimiento de los bonos emitidos por el Tesoro de los Estados Unidos de América han llegado a los niveles más altos de los últimos 7 años, el bono marcador predilecto es el de 10 años, el cual llegó a un rendimiento de 3.12, luego descendió y cerró la semana a 3.06%. Este aumento de los rendimientos está impactando y va a continuar haciéndolo en nuestra estructura de tasas de rendimiento.
El entorno local muestra algunas variables interesantes que deben tomarse en cuenta ya que tendrán repercusión sobre las tasas de interés y por lo tanto en el rendimiento de los bonos. Lo primero es que vemos una ligera aceleración de la inflación en lo que va de año, si bien no es para alarmarse, debe tenerse en cuenta ya que esto también le pondrá presión a las tasas de interés locales que deberán subir para mantenerse en niveles reales competitivos frente a las tasas de interés internacionales. Es de esperarse que la inflación aumente por razones de costo más que por razones de índole monetario: el impacto del aumento de los precios del petróleo lo veremos reflejado en las próximas semanas o meses de continuar la tendencia; adicionalmente el incremento de los precios del petróleo requerirá de mayor cantidad de divisas para satisfacer nuestras necesidades energéticas, esto será un elemento que podría inducir al Banco Central a virar hacia una política monetaria restrictiva a los fines de controlar los riesgos inflacionarios o de volatilidad cambiaria.
El mercado de valores ha estado marcado con una fuerte expectativa al alza de los rendimientos desde hace ya unos tres meses, las subastas de títulos convocadas por el Ministerio de Hacienda a través de la Dirección de Crédito Público, han sido declaradas desiertas en los últimos tres meses y, aún así, el mercado no ha visto un cambio en las expectativas. Adicionalmente, vemos que los Certificados Especiales de Inversión del Banco Central que han sido colocados en los últimos días, han puesto una presión adicional en un mercado que ya no tenía apetito por incrementar el riesgo, se ha notado un rápido incremento del rendimiento de los títulos marcadores de 7 años por la presión por el lado de la oferta con muy poco interés por el lado de la demanda, de hecho hemos visto que los oferentes continuamente deben mejorar sus ofertas con la intención de atraer a los pocos compradores.
Los tres factores anteriores: El alza de las tasas de rendimiento de los bonos del tesoro americano, el posible aumento de la inflación local y la oferta local de títulos con muy poca demanda han creado condiciones para que las tasas de rendimiento de los títulos continúen subiendo. Los inversionistas deben analizar sus portafolios y ponderar las decisiones que tengan a su alcance, en este momento el mantenerse en efectivo es quizás la mejor decisión, optar por mantener altos niveles de liquidez para esperar un buen momento de compra.