La Creación del Dinero en el Sistema Financiero
Por: José Antonio Cendón – Email: jcendon@cci.com.do
Gerente de Tesorería CCI Puesto de Bolsa, S.A.
4 de marzo de 2020
Desde principios del año pasado, los bancos centrales del mundo han implementado políticas monetarias ultraexpansivas con el fin de incentivar la dinamización de la economía, la cual se vio estancada como consecuencia de los efectos que trajo la pandemia del COVID-19. Al margen de los beneficios y las consecuencias que traen estas medidas, las mismas han impulsado un aumento significativo en la liquidez y esto invita a pensar sobre cuánto dinero hay en la economía y de cómo fue “creado”.
Para los bancos centrales existen varias maneras de “crear” dinero, dentro de las cuales destacamos: (i) el aumento en el número de créditos otorgados a los bancos comerciales y al sector público, (ii) compra de bonos de deuda pública, (iii) la liberación del encaje legal que mantienen las EEFF y, (iv) compra de divisas en el mercado. Si bien es cierto que estas medidas sirven como el inicio de la expansión del dinero, el proceso más importante ocurre en los bancos comerciales.
En ese sentido, se tiende a pensar que los bancos sólo actúan como “intermediarios” donde los depósitos son creados por los ahorros que las personas deciden colocar en la entidad, para que luego sean prestados a personas que necesitan dinero. Sin embargo, en la realidad los bancos son los principales creadores de dinero de una economía y el mecanismo que utilizan para hacerlo es a través de los préstamos.
Esta dinámica es una de las más importantes y recurrentes en el proceso de creación y destrucción de dinero y funciona de la siguiente manera: cuando el banco concede un préstamo, normalmente no lo hace entregando los billetes al prestatario, más bien acredita dichos fondos a la cuenta bancaria evidenciando que los bancos no solo pueden prestar dinero preexistente y que los préstamos y los depósitos tienen un efecto multiplicador en la expansión del dinero. De igual forma como se “crea” dinero concediendo préstamos (de consumo, hipotecarios, tarjetas de crédito, entre otros), el abono o extinción de estos financiamientos “destruyen” el dinero. Esto no quiere decir que no existan mecanismos de control sobre la cantidad de préstamos y/o depósitos que las entidades conceden y/o reciben de sus clientes. En la práctica, los bancos enfrentan varios retos que impiden que ese proceso sea ilimitado, donde el apetito de riesgo, las fuerzas del mercado y la regulación juegan un rol de contrapeso importante. No obstante, destacamos que el dinero se creará dentro del sistema financiero las veces que el coeficiente de encaje legal y el índice de solvencia lo permitan.
En conclusión, la mayor parte del dinero no fue creado a través de “impresoras” de billetes, sino en la banca comercial mediante los préstamos y las compras de activos a sus clientes. De hecho, desde hace algunos años la Junta Monetaria a través del Banco Central de la República Dominicana ha proporcionado a los agentes económicos y al público en general recursos monetarios para ser canalizados en préstamos a las tasas más bajas en nuestra historia. De manera ilustrativa, al cierre de febrero 2021, el Medio Circulante (M1) -dinero creado por el BCRD- presentó una variación de 34.05% y la Oferta Monetaria Ampliada (M2) -dinero creado por los bancos comerciales- presentó una variación de 19.16% con respecto al cierre del mes de febrero 2020.
Referencias
Michael McLeay, Amar Radia and Ryland Thomas (2014), ‘Money creation in the modern economy’, Bank of England Quarterly Bulletin 2014 Q1.